Pretendiendo dar un entierro de tercera a los preceptos de la fe cristiana, con un mensaje evangélico anunciado en Manchester (USA) y las revelaciones que Joseph Smith dice haber tenido; los “misioneros” mormones llamados élders o ancianos, accedían los hogares de clase media en busca de nuevos conversos o “indagadores”.
Detrás del proselitismo que desarrollan a diario y casa a casa, ocultan una maquinaria corporativa que opera a través de tres (3) estrategias: Estrategia de Mercadeo, Familias de Amistad y Lecciones Misioneras.
La estrategia de mercadeo es desarrollada por la empresa de comunicaciones Bonneville Internacional, responsable de difundir el mensaje “evangélico” mediante el uso de los medios televisivos, impresos, radio e internet y a través de películas y videos.
La Red Familias de Amistad, es una solapada herramienta de penetración social, que permite identificar a los eventuales conversos, adelantar la etapa de estimulación previa a la intervención del equipo “misionero” y hacer el acompañamiento de lo enseñado.
La sonrisa amable y los buenos modales de esos simpáticos y bien vestidos “élders”, es la mascara que luce la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, al implementar un método de adoctrinamiento que se apoya en cinco (5) parámetros a saber:
1. Convencer al “indagador” que al sentirse bien, se confirma la verdad de lo enseñado. 2. Exaltar la restauración del evangelio a través de Joseph Smith, y asegurar que el “indagador” acepte el Libro Mormon. 3. Presentar el mormonismo como continuación del Plan de Dios. 4. Hacer creer al “indagador” que se esta vinculando a otra iglesia cristiana y 5. Dar exclusividad a los textos mormones a medida que avanza la enseñanza.
Los “élders” deben establecer una relación de amistad con los “indagadores”, con el objeto de que asuman paulatinamente los siguientes compromisos: Leer y orar acerca del Libro Mormón; orar con respecto a Joseph Smith; ser bautizados; vivir la Ley de Castidad; vivir la Palabra de Sabiduría; obedecer la Ley de Ayuno; pagar los diezmos y prepararse para el sacerdocio (el hombre) y el matrimonio en el templo.
Los relatos de Joseph Smith deben enseñarse como artículos de fe ciega, a fin de que el “indagador” acepte que hay millones de dioses de carne y hueso; que Michael es el dios padre, Jane es la diosa madre y ambos fueron Adan y Eva; que Jesús fue engendrado sexualmente por Michael y Maria; que solo Joseph Smith hace posible la salvación; que es necesario bautizarse por los muertos y que si lo desea pude casarse con un difunto.
Esta es la doctrina que enseñan los “élders”, y frente a ellos el “indagador” jamás elige; de ahí que es necesario recordar, que no hay peor ciego que aquel que no quiere leer.
Detrás del proselitismo que desarrollan a diario y casa a casa, ocultan una maquinaria corporativa que opera a través de tres (3) estrategias: Estrategia de Mercadeo, Familias de Amistad y Lecciones Misioneras.
La estrategia de mercadeo es desarrollada por la empresa de comunicaciones Bonneville Internacional, responsable de difundir el mensaje “evangélico” mediante el uso de los medios televisivos, impresos, radio e internet y a través de películas y videos.
La Red Familias de Amistad, es una solapada herramienta de penetración social, que permite identificar a los eventuales conversos, adelantar la etapa de estimulación previa a la intervención del equipo “misionero” y hacer el acompañamiento de lo enseñado.
La sonrisa amable y los buenos modales de esos simpáticos y bien vestidos “élders”, es la mascara que luce la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, al implementar un método de adoctrinamiento que se apoya en cinco (5) parámetros a saber:
1. Convencer al “indagador” que al sentirse bien, se confirma la verdad de lo enseñado. 2. Exaltar la restauración del evangelio a través de Joseph Smith, y asegurar que el “indagador” acepte el Libro Mormon. 3. Presentar el mormonismo como continuación del Plan de Dios. 4. Hacer creer al “indagador” que se esta vinculando a otra iglesia cristiana y 5. Dar exclusividad a los textos mormones a medida que avanza la enseñanza.
Los “élders” deben establecer una relación de amistad con los “indagadores”, con el objeto de que asuman paulatinamente los siguientes compromisos: Leer y orar acerca del Libro Mormón; orar con respecto a Joseph Smith; ser bautizados; vivir la Ley de Castidad; vivir la Palabra de Sabiduría; obedecer la Ley de Ayuno; pagar los diezmos y prepararse para el sacerdocio (el hombre) y el matrimonio en el templo.
Los relatos de Joseph Smith deben enseñarse como artículos de fe ciega, a fin de que el “indagador” acepte que hay millones de dioses de carne y hueso; que Michael es el dios padre, Jane es la diosa madre y ambos fueron Adan y Eva; que Jesús fue engendrado sexualmente por Michael y Maria; que solo Joseph Smith hace posible la salvación; que es necesario bautizarse por los muertos y que si lo desea pude casarse con un difunto.
Esta es la doctrina que enseñan los “élders”, y frente a ellos el “indagador” jamás elige; de ahí que es necesario recordar, que no hay peor ciego que aquel que no quiere leer.
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